Ya hace algún tiempo que estaba fuera de onda sin escribir en el blog. Hoy ya con la temporada terminada, os cuento mi última pequeña decepción.
Con mi equipo infantil, muy cortito de efectivos (tan solo siete jugadores) hemos conseguido llegar a la final de la Copa Federación en Aragón, de lo que, por supuesto me encuentro muy orgulloso. Pues bien hasta aquí todo fantástico.
El problema es que la semana de antes de jugar la final estaba ilusionado en hacer buenos entrenamientos para trabajar estrategia y acciones que nos dieran alguna posibilidad de ganar a nuestro rival que era muy superior a nosotros. Mi disgusto mayúsculo fue que no pude entrenar ninguno de los dos días, y ¿sabéis porque? pues porque la mitad de mis chavales habían sido llamados para hacer pruebas en equipos de futbol. Mi pregunta, retórica como tantas, es ¿no se pueden esperar los equipos de futbol a terminar la temporada para llevarse todo lo bueno que hay en el futbol sala? Los chicos... ¿no pueden esperar a terminar la temporada para ir a hacer pruebas?
Por cierto al final perdimos la final, pero dimos la cara ...
En fin, como siempre, el futbol es nuestro hermano mayor, si si...pero de los que nos llevan siempre un paso por delante.
¿Qué os parece?