"El portero tiene un papel dramático: se juega ser héroe o villano".
Valdés jugó –y nunca mejor dicho- ambos papeles el pasado domingo: héroe para los azulgranas y villano para los andaluces.
El Barça sumó los tres puntos a duras penas. Adriano se encargó de ser el segundo protagonista del equipo catalán con un auténtico golazo, sin embargo, el mejor fue Valdés, que con tres grandes paradas evitó que el Málaga se llevara la victoria.
Hace unos meses, Víctor Valdés anunció que dejará el club catalán y que esta es una decisión irrevocable. La noticia sorprendió a muchos, pero a otros, entre los que me incluyo, no tanto. Ha realizado grandes hazañas para, por y con el Barça desde el primer momento y, seguramente, hasta que se marche a final de temporada, sin embargo, la grada culé nunca se lo ha reconocido como debería. Siempre ha parecido que él tenía que demostrar más que otros para que sus logros se vieran reconocidos. No es nuevo que apenas se hable de los porteros, pero en este caso aun más.
El Camp Nou siempre ha sido muy exigente, exquisito e incluso injusto con los porteros, pero con Valdés se han excedido. Nadie niega que sus principios fueran turbulentos, pero si la afición, que afirma orgullosamente ser un equipo basado en el uso de la cantera, le hubiera ‘mimado’ más, habría sido diferente. Siempre se ha dicho que “no se sabe lo que se tiene hasta que se pierde”, este caso parece que se convertirá en otro ejemplo que acredita esta afirmación.
Muchos criticaron la decisión de Valdés, algunos le apoyaron y comprendieron y la mayoría desea que se quede en Barcelona, demasiado tarde quizá.
Siempre se ha hablado de la “Messidependencia” que tiene el Barça, pero ¿qué pasará cuando no esté Valdés? Cuando el astro argentino no está sobre el césped, Valdés suele ser el protagonista por sus buenas actuaciones. Sin embargo, una vez que el cancerbero ya no esté y Messi no pueda jugar algún partido, ¿quién aparecerá? El Barça tiene grandes jugadores, muchas promesas y un estilo de juego que avala lo anterior, pero este mismo se caracteriza por la participación del portero desde el inicio de la jugada y esto son pocos los cancerberos capaces de conseguirlo.
¿Pinto? ¿Oier? ¿Reina? ¿Guaita? ¿Ter Stegen? ¡Incluso Casillas! Estas son algunas de las opciones de las que se ha hablado para sustituir a Valdés. “La pantera de L’Hospitalet” destaca por su capacidad para jugar con los pies, su aguante en el uno contra uno, sus grandes reflejos, su alta capacidad de reacción, su capacidad para mantener la concentración…
Valdés seguramente se acostumbrará a estar lejos del Camp Nou, pero… ¿el Camp Nou no extrañará a Valdés?
De seis puntos que se han jugado en Liga y que el Barça ha conseguido, Valdés ha salvado tres. Y todo esto si hablamos de la historia más reciente ya que si nos remontamos años atrás más de uno se asombraría. Víctor siempre ha sido ese héroe silencioso, que puede pasarse un partido entero sin ser puesto a prueba y, sin embargo, si en el minuto 89 el delantero rival se planta frente a él, Valdés siempre responde y suele salir él ganando. Tiene una capacidad de mantener la concentración que muchos anhelan y que el Barça tanto aprecia… Y necesita. Y por supuesto que ha fallado muchas veces, pero díganme quién no lo ha hecho nunca. En los momentos más necesarios, él estuvo ahí… De la afición hacia él no se puede decir lo mismo. Ya veremos qué le deparará el futuro a ambas partes.
De momento, ya se considera a Valdés el mejor portero de la historia del Fútbol Club Barcelona. Y suma y sigue porque cuando su equipo no está bien, él aparece. El Barça ha jugado mucho mejor en la vuelta de la Supercopa que la ida en el Calderón, pero los goles culés han brillado por su ausencia y los atléticos también gracias al cancerbero catalán. Víctor se convirtió en el protagonista de la noche con dos auténticas manos salvadoras, primero en el minuto 41 antes del descanso y posteriormente, en el 55. El héroe de la noche y el hombre que le ha dado el primer título al Barça de la ‘era Martino’.
Si esto sigue así… El Barça echará de menos a Valdés mucho más de lo que pensaba.
“Cuando un futbolista rival se planta cara a cara ante él, el aficionado del Barça respira tranquilo y piensa: ‘No pasa nada, está Valdés”